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E3, una cita ineludible.

Autor: @Bjdocampo

Aún quedan unos meses, pero la noticia está ahí. Muchos llevan años diciendo que está muerto, obsoleto, que ya no tiene cabida en el nuevo modelo de la industria, pero lo cierto es que es salir una noticia suya y se convierte en TT.

Hablamos del E3. La mítica feria del videojuego. La más mítica podemos afirmar. Vale que en los últimos años las presentaciones digitales como los Nintendo Direct se están imponiendo, o que otras ferias como el TGS o la Gamescon le hayan comido terreno, pero amigos, el E3 es el puto E3.

El E3 es el puto E3

Los que somos veteranos en estas lides lo vivimos de una manera especial. Es como la Navidad del jugón. Y si, digo jugón porque ‘’gamer’’ es una palabra muy moderna con la que un hombre con canas y que le pone tabasco a todo no se identifica. El E3 año tras año se ha caracterizado por ser ‘’El Show’’, la Superbowl de los videojuegos, la final de Champions, ese escaparate de los sueños que desde 1995 esperamos como agua de Mayo.

Vale que los últimos años ha sido un desastre. La feria pasó de ser ese escaparate de novedades y mentidero de secretos, a convertirse en una cita obligada con el chico que no te gusta pero que tienes que quedar con él, porque el resto de tus amigas tienen novio y tu te vas a quedar para vestir santos.

No se si me entendéis. La sensación de los últimos años es que las compañías asisten a ella simplemente porque las otras van. Bien es cierto que Nintendo hace tiempo que no acude, pero su Direct sigue siendo uno de los más esperados. Sony, por su parte, el año pasado hizo lo mismo y al final, todas las esperanzas las teníamos puestas en Microsoft, y, ¿Qué pasó? –Nada.

En el E3 nos voló la cabeza viendo a Mario saltar en 3D por primera vez y en el E3 del 97 vimos como Solid Snake volvía muchos años después para demostrar que los videojuegos podían igualar a las películas en su narrativa. Y vimos el primer Final Fantasy, el 7 como encumbraba para muchos al videojuego a la categoría de arte.

Ver a Mario gatear, saltar, caer de culo..libertad total, el salto era abismal.

En el 98 Nintendo sacudió medio planeta con Ocarina of Time, redondeando dos años extraordinarios y un muchacho de provincias japonés, S.Miyamoto, nos transportaba un pasó más allá del mando y la pantalla. Para muchos, servidor incluído, este es el mejor videojuego de la historia y quizás el que abrió el camino a todo lo que vino después.

Si hay una palabra para describir Ocarina of Time es ”magia”.

Ocarina of Time fue el juego que abrió el camino a todo lo que vino después.

En el 99 volvió la hija pródiga. Sega daba una hostia terrible sobre la mesa y traía las recreativas a casa. Dreamcast. Una máquina tan ambiciosa y tan redonda que como todas las luces más potentes, se apagó pronto. Se nos cayeron los huevos al suelo al ver que podríamos jugar a Sega Rally 2 en casa, aquella imagen de Sonic corriendo delante de una orca o Dios mío, las animaciones de ese Shenmue que nos hacían creer que no se podría llegar más lejos.

Pero si se pudo. Y con la llegada del nuevo milenio, Sony hizo los deberes y nos enseñó su PlayStation 2 y con ella, otro de los grandes hitos del E3. Metal Gear Solid 2. Kojima se lo tenía ya de aquella muy creído pero eso no impidió que nos volase la cabeza en aquel e3 de junio del 2000 con las animaciones que era capaz de generar aquel Emotion Engine.

MGS2 vendió él solito consolas y a día de hoy aguanta muy bien el tipo

La guerra seguía abierta y el E3 más vivo que nunca y un año después, el tío Bill se emperró en ganar en casa y ese mismo año Micrososft presentaba su Xbox. Un evento inolvidable donde un señor mayor en camisa y pantalón de franela nos enseñaba el nuevo verraco que llegaba a la industria. Por entonces nadie daba un duro por ella pero con el tiempo Xbox demostró que llegó para quedarse.

Un evento inolvidable donde un señor mayor en camisa y pantalón de franela nos enseñaba el nuevo verraco

Ese señor mayor enseñando su invento a sus amigos del bar

En 2002 el señor de provincias de Japón, le echó dos cojones y nos enseñó que un buen juego no era realismo, era belleza, y ese Zelda Wind Waker convirtió la polémica en reconocimiento.Todo el mundo esperaba un Zelda como el de la demo de presentación de GameCube y nos enseñaron esto. Otro hito del E3.

El tiempo puso en su sitio a todos los gilipollas que lo criticaban. Yo entre ellos.

Valve había revolucionado el mundo del FPS con su Half Life y en 2003 presentó su segunda parte, que más que una revolución por juego en si, fue por un motor gráfico que aún a día de hoy se sigue utilizando. Y si, esto también sucedió en un E3.

Half Life 2 más que una revolución por juego en sí, lo fue por un motor gráfico que aún a día de hoy se sigue utilizando

Miyamoto estaba caliente y en 2004, después de que todo el mundo dudase de él por el anterior Zelda, se encabronó, se calentó y subió al escenario con un escudo y una espada. Aquí estoy yo y mis huevos toreros, ¿Queríais un Zelda realista? –Pues aquí lo tenéis. Y de ahí sucedió la que quizás fuese la ovación más grande la historia del E3 con Zelda Twilight Pincess.

Mítico momento de la historia del E3 y mítica la altura de los pantalones.

En el 2005 Microsoft y Nintendo se fueron de cañas y dejaron vía libre a Sony con su PlayStation 3 y aquel Killzone que no dábamos crédito que fuese real. Un año un poco mierda, pero hay que recordar.

En el 2005 Microsoft y Nintendo se fueron de cañas

El de 2006 volvió a ser un E3 antológico. Una sola imagen y pasamos de año. Shigeru Miyamoto y Steven Spielberg jugando a Wii Sports. Los dos más grandes de las dos industrias más grandes presentando la nueva consola de Nintendo, que como todos sabéis unió a dos mundos, el jugón habitual y el jugador casual y a su manera, revolucionó de nuevo la industria. De locos.

Nuestros padres

Y ahí llegó el 2007. En el que no pasó nada. Literalmente. En 2008 pudimos ver a Nintendo hacer el ridículo con Wii Music, en 2009 vimos como Peter Molyneux se reía de todos nosotros con Milo y en 2010 vivimos el acontecimiento más surrealista de la historia de las ferias de videojuegos. Con aquella conferencia de Konami donde nada tenía sentido. En 2011 llegó Skyrim, juego que a día de hoy tenemos hasta en la Thermomix de Lidl y desde entonces…ya nada es como antes.

Y es que dicen que los tiempos pasados siempre fueron mejores, y en el caso del E3 es algo bastante cierto. Los que amamos los videojuegos queremos un E3 profesional. Un E3 de conferencias, un E3 de cobertura periodística. Un E3 que venda revistas, que genere artículos, entrevistas, pases privados para la prensa. Una feria diferente, de las de antes. Una feria para quedarte hasta las tantas viendo los anuncios en directo, como si fueran los Oscar.

Queremos un E3 que venda revistas, que genere artículos, entrevistas, pases privados para la prensa.

Esta es una opinión personal, cada uno ve las cosas como cree, pero desde el amor al videojuego y el deber del sentido común, creo que digo con seguridad que muchos pensamos esto. Aunque sea a través de una pantalla.

Larga vida al E3.

Corneo

Juego,leo y escribo

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